Transformación Digital y aforismos.

Introducción: De la palabra al hecho

Soy aragonés por nacimiento y me identifico como tal por convicción. Disfruto de los placeres que esta tierra, como otras, nos brinda. Uno de ellos es, el (en ocasiones) olvidado ,saber de quienes nos precedieron. Aunque me temo que este olvido puede servir como universal generalización.

Si también sois consumidores de contenidos en las redes sociales quizá compartáis mi sensación de vernos “bombardeados” por frases, refranes, poemas y proverbios. Por lo que abro un pequeño espacio para los aforismos.

Este «post» abre un ciclo en el que compartiré varios aforismos que se sugieren relación directa con la #TransformacionDigital

¿Qué es un aforismo?

Definiciones  hay muchas, localizarlas es bien simple hoy en día. De todas, la que para mi lo resume mejor puede ser :

“Un aforismo es una novela en una linea” – Leonid S. Sukhorukov. –

Como máximo exponente de este estilo podemos encontrar a Baltasar Gracián. Muchos de sus aforismos los dejó reflejados en su libro “el arte de la prudencia”. Todo un ejemplo de consejos y sabiduría del siglo XVII. Recomiendo su compra para una lectura aleatoria, ocasional o bien continuada.

“Lo bueno si breve dos veces bueno”

Sirva ese como primer ejemplo de aforismo y como pretexto para dar otro como introducción.

“Saber distinguir al hombre de palabras del hombre de hechos “ .

Aforismo nº 166

Los presuntuosos se satisfacen con viento. Las palabras deben ir acompañadas de hechos y así tener valor. Los árboles que no dan fruto, sino solo hojas, no suelen tener corazón. Conviene conocerlos: de unos se obtiene provecho, pero otros sólo dan sombra.

Se oye, se habla, se escucha e incluso se forma mucho en Transformación Digital. Pasar a la acción, pasar a los hechos es fundamental.

Fundamental, que la dirección de la compañía sean de fomentar y «pedir» hechos concretos. La antítesis de la parálisis por el análisis.

Aprovechemos los principios y fundamentos de las metodologías «agile» en la construcción de resultados desde unas primeras etapas. Y como en casi todo, la experiencia es un grado.

Haciendo hincapié en el tema de la formación. Considero que aquellas relacionadas con la Transformación Digital debamos contrastar la experiencia real que tienen los formadores en este tipo de iniciativas. Para llevarlas a cabo lidiamos con la gestión de un cambio cultural (progresivo y lento) en las empresas. A su vez, el cambio cultural, se combina con metodologías «agile» que sean flexibles y adaptables a cada entorno y situación.

Mejor busca un compañero de viaje (formador, consultor, agente de cambio) que haya ido más allá de un sólido conocimiento teórico. Las teorías deberán poder adaptarse, combinarse, desecharse, rehacerse a cada paso.

Las palabras solo son teoría, los hechos son la acción y realidad de la teoría en cada empresa.

Alguien de contrastada experiencia en las trincheras antes que a un Don Quijote que solo sabe de libros y que confunde a gigantes con molinos.